“Nuestro personal técnico dijo que GTA III no era malo. Era innovador, pero nada de otro mundo”.
Hoy día contar con la exclusiva de un Grand Theft Auto sale poco rentable a las compañías, pero tiempo atrás, exactamente en la anterior generación, el tema de exclusivos de renombre era mucho más fácil.
David Reeves, ex responsable de Sony Computer Entertainment Europa, ha comentado al medio británico Eurogamer que el tema de la exclusividad de GTA III fue una idea de última hora y que les salió “muy barato”.
De hecho la jugada le salió muy bien a Sony porque Grand Theft Auto III fue uno de los juegos más vendidos de PlayStation 2, y posiblemente una de las causas por las que el sistema de Sony vendiera más que sus rivales Dreamcast, Gamecube y Xbox.
Sony se tomó muy en serio el E3 del 2000 para conseguir una serie de exclusivos: “Unas semanas antes, nos sentamos y elegimos juegos que pensamos que serían buenos como exclusivos. Teníamos una lista de 7 juegos y un montón de dinero”, afirma.
Comenta que en pleno E3 invitaron uno a uno a los editores que poseían juegos que les interesaban, ofreciéndoles “una tarifa reducida de publicación en PlayStation 2, un apoyo en el marketing y equipos de nueva generación, a cambio de juegos exclusivos”.
De hecho, la última reunión fue muy informal con Take-Two. Y el primer juego que Sony tenía en mente era State of the Emergency, un título que a fin de cuentas “no pensábamos ni que fuera a salir en Xbox”. Y habla de cómo surgió lo de GTA III: “Pues entonces les dije: ‘¿Tenéis algo más?’ y ellos me dijeron ‘Bueno, tenemos este juego del Grand Theft Auto III… supongo que podríamos llegar a un acuerdo’”.
Reeves señala que “nuestro personal técnico dijo que GTA III no era malo. Era innovador, pero nada de otro mundo. Acabábamos de escuchar que era bueno. Así que le di el OK”.
Al ser preguntado cuánto le costó a Sony el acuerdo, Reeves contestó: “Muy barato”.