El equipo era responsable de abundantes ports de títulos como Alvin y las Ardillas, Tiger Woods PGA Tour o Jackass: The Game.
David M. Rushton, el presidente de Sensory Sweep Studio, ha sido condenado a un año de cárcel por el impago de las abundantes deudas que arrastraba el estudio y que han alcanzado cifras por encima del millón de dólares en lo debido a sus más de cien empleados.
Adam Hunter, uno de los trabajadores afectados, reconocía que no conoce "a nadie que haya sido pagado de forma habitual" a parte del propio Rushton. Según declara Hunter, el presidente empleó una plantilla de 211 personas para trabajar en ports rápidos y juegos de licencia como Alvin y las Ardillas, Tiger Woods PGA Tour o Jackass: The Game.
El propio Hunter asegura que cuando se marchó del estudio se le adeudaban todavía 12.000 dólares, y que entre la plantilla se bromeaba de forma habitual con que "cobrarían el próximo viernes" una semana detrás de otra.