Un programa televisivo retrata el castigo de unos padres a su hijo.
El programa 20/20 de la cadena norteamericana ABC del pasado 19 de mayo, dedicado a la adicciones digitales, presentó una historia centrada en un jugador compulsivo de 14 años, Josh, y su curioso forma de rehabilitación en el desierto. Según los padres del joven, éste pasaba más de 12 horas diarias jugando, especialmente a Counter-Strike: Global Offensive. Y, tras de intentar frenar el desmedido interés del usuario de varias formas poco exitosas, capaces incluso de despertar una actitud agresiva en el chaval, sus progenitores decidieron ponerse en manos de los especialistas del programa.
De acuerdo a la información, estos decidieron atajar el problema con una terapia de choque, alejando al muchacho, contra su voluntad, del entorno familiar para dejarle en mitad del desierto de Utah a modo de rehabilitación en una acampada prolongada durante dos solitarios meses. El equipo médico asesor afirma que tras ésto, y con los resultados de unas resonancias magnéticas del joven, encontraron evidencias de un cambio notable en su actividad cerebral. Desconocemos si Josh ha logrado superar su problema gracias al programa, pero sin duda tardará en olvidar la experiencia.
Como última curiosidad, en un momento determinado el programa retrata el realismo CS:GO a su audiencia recreando una escena de acción real con réplicas de armas y sonidos auténticos de disparos. No fue el único caso problemático presentado en el episodio de 20/20; también se mostró a un padre de familia enganchado a la consola y un adolescente fanático de Minecraft. Una vez más los medios generalistas vuelven a retratar el mundo del videojuego como una potencial fuente de problemas domésticos, mentales y comportamientos agresivos, con informaciones poco contrastadas y centradas en casos aislados y puntualmente llamativos.