Las primeras horas de Final Fantasy XVI son muy intensas y Square Enix no ha dudado en ir hacia adelante con la idea. Desde hacer frente a un Molbol, pasando por un Caballero dragontino, el pobre Clive ya puede tener todas sus habilidades lo mejor configuradas para este enfrentamiento...Se trata de uno de los combates más frenéticos de las primeras horas y, por ello, en la siguiente guía, te contamos todos los detalles sobre cómo derrotar a este enemigo.
Cómo derrotar al Caballero dragontino auroral en Final Fantasy XVI
Este enemigo se presente ante nosotros cuando nos encontramos en Pórtico del Fénix. Vendremos de hacer frente a unos cuantos enemigos menores, por lo que no es raro que necesitemos un par de intentos para acabar con él. Esto lo digo debido al hecho de que es posible que lleguemos sin reservas de pociones.
Con todo ello, lo primero que notaremos es que estamos ante un enemigo más rápido que el resto. Es decir, tenemos que hacer uso de la esquiva todo lo posible. No me voy a cansar de comentar que es de nuestros grandes aliados y que es mejor hacerla perfecta para poder contraatacar que machacar botones. El ataque principal de este enemigo es "Salto". Como su nombre indica, se alzará hacia los cielos y caerá sobre nosotros. Solo tenemos que hacer atentos al suelo, puesto que marcará el lugar en el que va a caer y esquivar. Suele tardar unos 2-3 segundos en caer.
Como siempre, nuestro objetivo es aprovechar para atacar cuando este es vulnerable. Sin embargo, también tenemos que estar pendiente a los quick-time events que van apareciendo de vez en cuando. Hay tiempo de sobra con ellos, así que no hay que agobiarse en absoluto. En este momento del juego, tendremos que seguir manteniendo la estructura de Tetracombo + Piro, pero también podemos empezar a hacer uso de las embestidas de Fénix y sus habilidades. Yo recomiendo hacerlo mientras este no está en una posición de desventaja, porque son estas las que nos ayudan, precisamente, a conseguirlo.
Una vez su vida comience a bajar, el caballero comenzará a realizar un "Doble salto" con más frecuencia. La única diferencia reside en que, como su nombre indica, saltará dos veces sobre nosotros. Por el resto, este enemigo tratará de atacarnos con su lanza y, pese a que tal vez queramos estar lejos de él, lo ideal es acercarnos y poner en práctica la danza de la esquiva. Algo similar a lo que pasaba con Genichiro en Sekiro, que había que ir directo aunque pensásemos que no, pero de una forma mucho más accesible y sencilla.
Una vez hayamos terminado con él podremos seguir con nuestro camino, pero no olvidéis estos consejos, puesto que no va a ser el primero de su estirpe que nos encontremos. Eso sí, más adelante será casi como coser y cantar. El verdadero reto se encuentra en la primera vez que le hacemos frente a uno.
Si con todo esto, todavía queréis más información sobre el juego, os recomiendo leer nuestro análisis de Final Fantasy XVI en el que te contamos muchos más detalles. Además, podéis comentarlo junto a otros miembros de la comunidad uniéndote al servidor de Discord de 3DJuegos.
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