Siendo una IP tan establecida, el buque insignia de Xbox generará preferencias diferentes.
Los seguidores de la saga Halo llevan años siguiéndole la pista, casi a ciegas, a la serie homónima de (anteriormente) Showtime; pero a medida que nos acercamos a su fecha de estreno ganamos también una perspectiva ligeramente más precisa de lo que nos ofrecerá esta producción. Y no será del gusto de todos, reconoce la productora: el problema, más que el contenido en sí, es que hablamos de una IP con una sombra muy larga.
Llega un punto en el que no puedes satisfacer a todos
En una entrevista con IGN, Kiki Wolfkill —que lleva asumiendo cargos de productora desde los primeros pasos de 343 Industries con Halo 4— reflexiona sobre el tema: "Es fantástico tener estas comunidades de fans tan dedicadas [...] Pero también es difícil, porque hay perspectivas muy diferentes. Llegas a un punto en el que no puedes satisfacer a todos. Debes encontrar tu propio camino".
Teniendo en cuenta los profundos debates que generan asuntos tan aparentemente simples como el sprint o el apuntado, no es extraño que la dirección de toda una serie termine estando igual de polarizada, como mínimo. "Lo que queremos es que juegues al juego y tengas una idea de quién es ese personaje, que te guste, y que luego pares y separes eso para disfrutar de esta otra experiencia que te lleve en un viaje diferente [...] y veas a ese personaje de otra forma, sin que eso destruya la imagen del personaje con el que ya te habías encariñado en el juego".
En realidad, el mundo de Halo ya se ha adaptado a múltiples formatos, cada uno con personalidades diferentes: novelas, películas, series de animación y por supuesto, videojuegos. A la espera de ver qué nos depara esta serie, recordamos que llegará a Paramount+ el próximo año tras anunciar un retraso motivado, en buena parte, por los inconvenientes de la crisis sanitaria internacional. Mientras tanto, Halo Infinite será la cita imperdible de Xbox y PC cuando llegue a tiendas en algún punto del otoño de 2021.