Una decisión de Blizzard que no ha sentado nada bien entre los usuarios del F2P de naipes.
La relación de Hearthstone con World of Warcraft es lógica, puesto que comparten universo a pesar que la diferencias jugables sean obvias y salten a la vista. Sin embargo, pocas veces se había creado una sinergia como la presente, ya que que Blizzard, creadora de ambas, de alguna forma está obligando a jugar al MMO si los usuarios del F2P quieren acceder gratis a un nuevo contenido del juego de cartas.
Liandrin, la nueva paladín de Hearthstone, no estará al alcance de cualquier jugador: si quieres jugar con ella en el juego o la nueva ampliación, Susurros de los Dioses Antiguos, deberás alcanzar el nivel 20 de un nuevo personaje de World of Warcraft. La buena noticia es que no es más que una nueva cara para la categoría de paladín, con nuevas animaciones y nuevas burlas, pero la decisión no ha caído nada bien entre los jugadores del título.
Para un usuario nuevo en World of Warcraft alcanzar el nivel 20 puede costar algo más de tres horas. La parte positiva del presente hecho, claro, es ampliar miras y conocer, si es que aún no has disfrutado del juego de rol, el que es uno de los productos más rentables y conocidos de la última década en nuestra industria.