Su creador cree que es debido al "odio" que despiertan los controles por movimiento entre los jugadores hardcore.
A falta de seis días para que finalice el plazo de financiación colectiva de Kung-Fu Superstar en Kickstarter, este juego basado en combates de artes marciales está muy lejos de alcanzar su objetivo, con tan solo 36 mil libras de las 200 mil solicitadas por el equipo de Kinesthetic Games. ¿Los motivos? Según explica el director del estudio, Kostas Zarifis, esto es debido al "odio" que despiertan los juegos basados en sistemas de control por movimientos entre el público hardcore.
"Sabemos lo que la mayoría de jugadores hardcore piensan acerca de los sistemas de control por movimientos"; ha declarado en una entrevista con el portal británico Eurogamer. "No hablamos simplemente de indiferencia, sino de odio. Y con razón", apostilla el creativo.
"Desde el nacimiento de estos controles por movimientos han sido decepcionados constantemente. Desafortunadamente, este es el clima con el que hemos tratado en Kung-Fu Superstar", continúa. "También fuimos lentos al explicar que Kung-Fu Superstar no es un juego exclusivo para controles por movimientos. Cualquiera que haya visto las demos y haya comprobado cómo se combinan el control por movimientos con el tradicional nos dicen ‘No puedo creer lo innovador que es esto. ¿Cómo no se había hecho antes?’", añade el creativo tras juegos como Fable.