El equipo de CI Games reconoce que ha sido un proyecto "más ambicioso" del que podían asumir.
Era un proyecto ambicioso, que prometía mucho, pero finalmente Sniper: Ghost Warrior 3 se quedó lejos de las altas expectativas que había originado. El equipo de CI Games lo sabe, y ha entonado el mea culpa, reconociendo que la apuesta por un mundo abierto fue "un gran error" que terminó pasando factura al videojuego.
"Hemos aprendido mucho como equipo durante el desarrollo de Sniper Ghost Warrior 3, y creo que esto ha servido para pulir el talento de los integrantes de CI Games y cambiar el estudio a mejor", asegura el director ejecutivo del equipo, Marek Tymiñski. "Cuando comenzamos a desarrollar SGW3, apostamos por un juego de mundo abierto de escala relativamente grande que ahora vemos fue demasiado ambicioso frente a lo que podíamos ofrecer en un plazo de tiempo razonable".
"Simplemente hicimos mal los cálculos teniendo en cuenta el tamaño de nuestro equipo y el calendario de trabajo del que disponíamos", continúa. "Posicionarlo dentro de la categoría de los Triple A nos alejó de lo que podríamos haber hecho mejor. Y en vez de eso, empleamos muchos esfuerzos en intentar estar a la altura de otras producciones AAA en términos de valores de producción y opciones de juego. Fue un gran error".
No todo son conclusiones negativas. Tymiñski asegur que su equipo ha aprendido la lección y ya caminan hacia el futuro "sin ningún tipo de etiqueta preconcebida". Su objetivo es crear "un gran shooter táctico donde nos centraremos en un alucinante estilo de juego, algunas mecánicas clave y misiones con profundidad sin todos los aspectos relacionados con un juego de mundo abierto. Queremos hacer de este juego algo incluso más táctico que SGW3 y creemos que los últimos tres años han creado un maravilloso punto de partida sobre el que podemos desarrollar nuestro próximo juego".