Starfield comenzó la lista de lanzamientos de este último cuatrimestre del año con una fuerza descomunal. La espera finalmente terminó para el RPG espacial de Bethesda y, a pesar de sus problemas, se llenó de gloria entre sus jugadores. Esta semana hemos conocido que, en realidad, el juego estuvo listo a finales de 2022, pero el equipo de Todd Howard prefirió tener 9 meses de pulido, pruebas internas y demás. Sin embargo, esto también tuvo su parte muy negativa y se le pidió al equipo de calidad trabajar con Starfield incluso en vacaciones.
Según comentó el propio Todd Howard en una entrevista con Game Maker's Notebook junto al CEO de Insomniac Games, Ted Price, para hablar de los lanzamientos de Starfield y Marvel's Spider-Man, el padre del RPG espacial destacó que "nuestro objetivo durante las últimas vacaciones fue que todos en casa jugaran a Starfield". El creativo añade que "hubo errores que corregir, pero tenemos un juego completo y podemos jugarlo".
De hecho, rescatando esos 9 meses antes mencionados, Howard confiesa que todo el equipo estuvo "probándolo durante todo el año (2023) sin parar, ajustándolo, arreglándolo. No quiero decir cuántos errores aparecen en nuestros juegos. Tuvimos mucha ayuda del equipo de control de calidad".
Si bien el mismo director asume que esta fue la máxima del equipo desde un comienzo, un periodo de prueba largo, estas palabras hacen arquear la ceja a más de uno. Si bien es muy normal que un equipo juegue a su "bebé" antes y después del lanzamiento, hablamos de un trabajo de prueba y error para pulir el lanzamiento, pero un trabajo al fin y al cabo.
Durante la entrevista, Howard parece querer puntualizar que se acogieron a las horas estipuladas y "probarlo en vacaciones" se integró dentro del horario regular del trabajo desde casa. GamesRadar ha intentado contactar con Bethesda para arrojar luz sobre cómo se programó el trabajo de su equipo durante estos periodos festivos, pero hasta ahora no ha habido diálogo entre ninguna de las partes. Una situación alarmante donde no es la primera vez que vemos como protagonista de una historia trágica de trabajo excesivo a un equipo de control de calidad (QA).
Activision, por ejemplo, ha estado en el punto de mira este último lustro con su equipo de pruebas de Warzone y Call of Duty; algo que llevó a protestas y acciones sindicales dentro de los estudios. De hecho, a comienzos de este año dos miembros del equipo demandaron a la multinacional por haber sido despedidos de manera injusta tras estas protestas.
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