El prometedor programa está labrando mala fama por culpa de malas prácticas.
Early Access permite a usuarios disfrutar de juegos que están en desarrollo constante, es decir, obras que están siendo desarrolladas y que se van actualizando según los programadores trabajan en ella. Eso se traduce en beneficios para esos artistas, ya que están vendiendo el producto antes de tiempo y pueden invertir esos beneficios para seguir trabajando en ello.
Esa es la idea idílica del servicio, pero en la práctica no todo el mundo la está llevando a cabo de forma tan honesta. Early Access se está labrando mala fama en los últimos tiempos debido a desarrollos que se acogieron a esa forma de vender el software y que acabaron siendo abandonados con el tiempo, dejando a sus usuarios con un juego pagado y sin acabar.
Para evitar que eso siga sucediendo, Valve ha tomado cartas en el asunto. Se ha añadido cuatro nuevos consejos para los desarrolladores que se acojan a Early Access, explicando qué es y qué no es el servicio:
- No lances el juego en Early Access si piensas que no podrás acabar el juego con pocas o ninguna venta.
- Asegúrate que las expectativas que creas sean acordes al juego que estás creando.
- No te lances a Early Access sin un juego que se pueda jugar.
- No lances el juego en Early Access si ya está acabado.
En las mismas líneas de Valve, comentan en la página que "trabajamos muy duro para que los clientes entiendan qué es lo que compran en el Early Access de Steam, pero hemos comprobado que esos juegos se están vendiendo como códigos en otras webs sin explicar previamente qué es Early Access o en qué estado se está vendiendo el juego". El servicio es prometedor y de gran ayuda, pero está ocasionando más de un dolor de cabeza a la empresa de Newell.