Sus herramientas gráficas les permiten implementar nuevos contenidos jugables de manera inmediata.
El espectacular The Division para PlayStation 4, PC y Xbox One se ha convertido en uno de los títulos más esperados de 2014, y no sin razones, en parte gracias a su apabullante despliegue tecnológico. Lo que sorprende viniendo de un equipo relativamente pequeño como es Massive, creadores de la serie Ground Control o el más reciente World in Conflict, que reconocen que una de sus máximas a la hora de desarrollar esta aventura de acción y rol multijugador masiva en línea fue la de crear unas herramientas gráficas que les permitieran trabajar sin excesivas complicaciones. Y así ha sido.
Porque una de las mayores virtudes de su Snowdrop Engine es que les permite integrar de manera inmediata cualquier nuevo elemento jugable sobre el programa, dándoles así la oportunidad de probar antes de seguir trabajando sobre esa idea.
"Massive es un estudio más pequeño de lo que su nombre sugiere, por lo que necesitaba construir un motor gráfico de nueva generación que otorgara al equipo un grado de flexibilidad y eficiencia sin precedentes", se puede leer en el blog oficial de Ubisoft. La idea era, prosiguen, crear unas herramientas que permitieran hacer las cosas "’de manera más inteligente’, en vez de llevarlas a cabo ‘de forma más grande’".
En este sentido, explican, el apartado tecnológico de The Division nace de tres pilares esenciales: "poder, tiempo real y diversión", en el sentido de que "cada cosa que crean los desarrolladores necesita ser integrada in-game de manera instantánea, de tal modo que puedan saber al instante de qué modo funciona sin perder tiempo".
"Diseñamos Snowdrop de forma que el programa siempre fuera jugable durante el desarrollo. Esto no solo nos permite obtener la mejor calidad posible, sino también alcanzar un alto nivel de coherencia dentro del juego", explican desde el estudio de desarrollo.