Desde hace unos meses, San Francisco (una de las ciudades más pobladas de Estados Unidos) permite a los coches autónomos realizar servicios de transporte de pasajeros. De esta forma, las calles de la ciudad se llenan por la noche de este tipo de vehículos, una situación que no gusta a ciertos usuarios que señalan que, además de acabar con el trabajo de las personas, las acciones de estos vehículos bloquean a elementos cruciales como autobuses o ambulancias e, incluso, se han visto inmersos en atropellos de perros callejeros. Por ello, a los activistas se les ha ocurrido una curiosa forma de inutilizar estos vehículos: utilizando un cono.
Tal y como se puede ver en varias publicaciones de Twitter, los vehículos autónomos se detienen al colocar un cono de tráfico de forma suave en su capó. Por alguna razón, los coches interpretan este elemento como peligroso, razón por la que deciden dejar de circular y se quedan estacionados en ese mismo lugar. Para los manifestantes, esta es una gran forma de protestar, ya que afirman que no dañan la propiedad de nadie y además lo consideran “una táctica divertida y efectiva”. Sin embargo, responsables de compañías como Waymo (con una flota de taxis autónomos) no han dudado a la hora de asegurar que tomarán medidas contra los activistas.
Los dueños de los coches autónomos amenazan con avisar a la policía
Como recoge Techspot en una reciente publicación, un portavoz de Waymo (empresa que forma parte de Alphabet, un conglomerado tecnológico que incluye firmas como Google) señaló que este tipo de protestas es un acto vandálico que fomenta “un comportamiento inseguro e irrespetuoso en nuestras carreteras”. Por ello, la compañía asegura que no tendrá reparos a la hora de llamar a la policía si sorprende a cualquier usuario intentando detener cualquiera de sus vehículos con los mencionados conos de tráfico.
En la actualidad, algunos responsables de San Francisco se encuentran debatiendo si abren la mano con la flota de taxis autónomos y, en lugar de dejarles operar solo por las noches, extienden sus servicios 24 horas los 7 días de la semana. Esto, para muchos, implica un posible aumento de bloqueos a autobuses y ambulancias, un aspecto al que hay que sumar la posibilidad de que muchas personas pierdan su trabajo. Por ello, lo más probable es que las manifestaciones con conos de tráfico se sigan produciendo en los próximos días.
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