El teletrabajo se convirtió en el bote salvavidas de muchas empresas durante los meses de la pandemia. Así, a comienzos de 2020, algunas firmas tecnológicas dieron a sus empleados la oportunidad de trabajar desde casa, ya que la imposibilidad de dirigirse a las oficinas habría provocado un colapso en el volumen de trabajo. Sin embargo, la vuelta a la normalidad ha llevado a firmas de la talla de Amazon, Google y Meta a tomar una determinación: sus empleados deben volver a las oficinas.
Desde entonces, diferentes estudios han ahondado en el impacto real que tiene el teletrabajo en la productividad de los empleados. En esencia, muchos coinciden en que los efectos que tiene operar desde casa sobre la labor de los trabajadores es mínima, e incluso algunos señalan que la mayoría de directivos quieren que sus empleados regresen a las oficinas solo por una cuestión de ego. Sin embargo, tal y como señala Techspot en una reciente publicación, la reciente decisión de IBM ha afectado incluso a los altos cargos de la compañía.
Un ultimátum para todos los miembros de IBM
Como se indica en la publicación del portal norteamericano, el pasado 16 de enero IBM lanzó un memorándum interno en el que dejó clara su postura: o los directivos vuelven a la oficina o tendrán que dejar la empresa. En línea con el sistema híbrido que muchas compañías están adoptando, IBM ha invitado a los altos cargos de la compañía a acudir tres días a la semana (como mínimo) a las instalaciones de la compañía. De lo contrario, determinarán que los directivos desean abandonar la compañía, dado que ni siquiera estos podrán “eludir el mandato”.
Según ha confirmado un miembro de la firma norteamericana, los directivos que no vivan cerca tienen hasta principios de agosto para trasladarse a un radio de 80 kilómetros de las oficinas. De lo contrario, IBM asumirá que no están interesados en su puesto y, por consiguiente, les invitarán a abandonar la empresa. Sea como fuere, esta decisión demuestra que cada vez menos empresas tienen fe en el trabajo, ya que incluso los miembros de Zoom criticaron lo difícil que es hacer que una empresa prospere con este método.
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