Cuando pensamos en el Universo Cinematográfico de Marvel -o MCU para abreviar- obviamente todos lo relacionamos con las películas que se fueron produciendo desde Iron Man en adelante. Ya habíamos disfrutado de otras cintas centradas en conocidas propiedades de la Casa de las Ideas (X-Men, los 4 Fantásticos, la trilogía de Spiderman de Sam Raimi), pero hay una que muchas veces es olvidada y que tuvo como protagonista a uno de los antihéroes del universo creado por el irrepetible Stan Lee.
Blade (1998) de Stephen Norrington fue la primera película moderna o actual del género de los superhéroes, mucho después de que las de Superman protagonizadas por Cristopher Reeve coparan las taquillas en los años 80, pero también mucho antes de la bonanza por traspasar al celuloide a grupos de héroes tan icónicos del cómic como Los Vengadores. Pero la cuestión es que, por la naturaleza oscura -tanto del personaje y del comic como del film- no se la recuerda tanto, pero es injusto no reconocer lo que esta producción, protagonizada por Wesley Snipes, fue capaz de sacar a la palestra, e inspirar en buena medida lo que sería el género de los superhéroes y que ha dado grandes producciones hasta nuestros días; un cuarto de siglo después del estreno de esta película.
Snipes quería ser Black Panther antes que Blade
El film nos muestra la versión cinematográfica del guerrero mestizo entre vampiro y humano Blade (Wesley Snipes). Nacido de una madre humana que falleció por la mordedura de un vampiro, murió al dar a luz a su hijo. Éste, heredó la fuerza y las habilidades de los vampiros pero sin una de sus peores debilidades: el no poder exponerse a la luz del Sol. De ahí el mote que le dan los seres a los que persigue; el que ha visto el Sol.
Con la ayuda de su mentor y aliado, Abraham Whistler (Kris Kirstoferson),Blade lucha contra los vampiros y sus secuaces para evitar que utilicen los conocimientos de la Dra. Jenson (N'Bushe Wright) para que un grupo de radicales liderados por Deacon Frost (Stephen Dorff) completen un ritual que resucite a una antigua deidad vampírica y permita a su raza dejar de esconderse de los humanos para apoderarse del mundo.
A grandes rasgos, esta es la trama de un film que -curiosamente- Snipes no sabía que iba a protagonizar cuando fue contactado por Stephen Norrington. El actor afroamericano sabía que iba a tomar parte en una película de super héroes, con uno de su misma etnia en el papel protagonista. Wesley Snipes llevaba ya un tiempo deseando interpretar a Black Panther e inicialmente pensó -y hasta esperó- que fuera ese el papel que le tocaría encarnar; aún faltaban 20 años para que dicho film tomara forma, y el papel acabaría recayendo en el apreciado y ausente Chadwick Boseman. Igualmente, Snipes se vería apartado de los focos durante varios años cuando fue hallado culpable de defraudar al fisco norteamericano y enviado a prisión, con lo que de haber ocurrido el film, difícilmente habría podido optar a interpretarlo.
El paso de Snipes por Marvel como Blade dio como resultado un film bastante oscuro para lo que se entendía como una ''peli'' de super héroes
El caso es que el paso de Snipes por la factoría Marvel como Blade dio como resultado un film bastante oscuro para lo que se entendía como una ''peli'' de super héroes a finales del S.XX. Lejos de la visión heroica y noble, Blade se presentó como un claro antihéroe, fiel a la figura que podemos leer de los cómics. Hay varias opiniones que califican este film como uno de los que inspiraría a las hermanas Wachowsky (por aquel entonces hermanos) a realizar Matrix: la estética, tono y premisa del film se asemejan bastante a la primera parte de la trilogía portagonizada por Keanu Reeves. También destaca por la gran química en pantalla que tuvo Snipes con Stephen Dorff.
Posteriormente reveló que su antagonista en el film fue un grandioso mentor a la hora de interpretar un papel que no sabía muy bien cómo encarar. Snipes fue tutorizando a Dorff en algunas de las escenas más difíciles para el, y especialmente cuando David Fincher visitaba el set para ver cómo progresaba el film. Entre la motivación que eso suponía y los consejos de Snipes, Dorff y su ''enemigo'' en pantalla iniciaron una buena relación de camaradería a partir de ese film.
Anécdotas aparte, y pese a contar con unos efectos especiales algo arcaicos para la época (como el uso de maniquíes de cartón en una escena que transcurre en el metro de la ciudad donde tiene lugar el film, o la aparatosa creación e interpretación del mórbido vampiro Pearl, muy similar a la Reina Alien de James Cameroon o Jabba el Hutt en el Retorno del Jedi, con varios actores en el interior de dichos monstruos), el film gozó de una apreciable aceptación por parte del público. Sólo en España la recaudación fue de un millón y medio de dólares en su primer fin de semana, para un montante total en el mundo de 131 millones; el triple de lo que costó hacerlo.
Las bases de un Imperio que se tambalea por sus propios creadores
El resto de la historia concerniente a este film ya os la he dicho un poco al principio, con los films de Marvel empezando a dar sus primeros pasos pese a que los que se producían por parte de DC se iban agostando y no acababan de cuajar (aún tengo sudores fríos al pensar en el Batman y Robin de Joel Schumacher). Resulta curioso que una película destinada a un público no tan fan del género de super héroes en aquella época fuera la responsable de que se empezara a gestar una de las franquicias de cine más exitosas de todos los tiempos. Aunque no está integrada dentro del MCU (igual que X-Men, pese al cameo del Profesor X en el Multiverso de la Locura), sería difícil que Marvel Studios hubiera empezado a construir lo que se tiene hoy sin lo que supuso el estrenar esta película.
La película fue la responsable de que se empezara a gestar una de las franquicias de cine más exitosas de todos los tiempos
Y no es para menos, con Vengadores Endgame y la práctica totalidad de las películas de Marvel hasta la Fase 3 teniendo en su haber algunos de los bombazos en taquilla más importantes de todos los tiempos y con el género de los superhéroes como telón de fondo. Por desgracia, todo lo bueno se acaba.
Los últimos resultados de las películas más recientes están muy por detrás incluso de lo que ofrecieron esos primeros films de Marvel ,incluso con los 4 Fantásticos originales con Chris Evans todavía siendo la Antorcha Humana, y no el ''Capi''. Tal es el desencanto unánime con lo que están haciendo Disney y los responsables de Marvel Studios con los super héroes, que incluso algunos de los que tomaron parte en la concepción de este film dudan de que las nuevas versiones vayan a tener éxito. Sin ir más lejos, el propio Stephen Dorff no ha tenido reparos en criticar de manera muy dura la nueva versión de la original que él mismo coprotagonizo con Snipes.
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El caso es que, si por lo que fuese, no podéis disfrutar de la película esta noche en Neox, no es un film especialmente difícil de encontrar para vídeo doméstico, pues a día de hoy todavía se edita en todos los formatos físicos disponibles, desde el DVD, pasando por Blu Ray, hasta Ultra HD. Personalmente, si os gusta el género de los super héroes pero queréis una versión algo más oscura y menos edulcorada o ''clara'' del universo Marvel, no os lo deberíais perder.
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