El príncipe heredero saudita, Mohamed bin Salmán, estaría buscando que la economía del país dependa menos del petróleo.
No se puede decir que este 2022 no esté siendo sorprendente en cuanto a inversiones y adquisiciones se refiere, el año arrancaba con Microsoft comprando Activision Blizzard por cerca de 70.000 millones de dólares en una de las operaciones más inesperadas de la historia de los videojuegos, seguido por PlayStation haciéndose con Bungie, estudio tras Destiny y Halo, por 3.600 millones de dólares.
Pero todavía queda mucho año por delante y parece que nos esperan muchas noticias en este ámbito. En esta ocasión han sido los padres de Street Fighter, Resident Evil y Monster Hunter los que han recibido la mirada de Mohamed bin Salmán, el príncipe heredero de Arabia Saudí, quien ya había mostrado su interés por el mercado de los videojuegos en anteriores ocasiones, con inversiones tan importantes como la que llevó a cabo en 2020, haciéndose con el 33% de SNK.
La inversión ha llegado esta vez por parte del fondo soberano de Arabia Saudí, tal y como ha informado VGC, y habría supuesto un desembolso de más de 1.000 millones de dólares del Fondo de Inversión Público del país. Esta operación ha llevado a Arabia Saudí a hacerse con el 5% tanto de Capcom como de la compañía surcoreana Nexon.
Arabia Saudí se ha hecho con el 5% de ambas compañías
Estas inversiones en videojuegos por parte de los dirigentes sauditas estarían buscando conseguir que su economía dependa menos del petróleo, trabajando para ser "una potencia de inversión global y el inversionista con más impacto en el mundo, permitiendo la creación de nuevos sectores y oportunidades que den forma a la futura economía global, mientras impulsan la transformación económica de Arabia Saudí", tal y como puede leerse en la web del Fondo de Inversión Público.
Sobre las grandes inversiones en videojuegos, Toni Piedrabuena os habla en su columna de opinión sobre una hipotética desaparición de la clase media del videojuego, siguiendo el camino de los milmillonarios del cine y el deporte.