Querrían evitar la confusión que existió en su día entre 3DS y Nintendo DS.
Tras las dudas que generó la presentación de Wii U durante el pasado E3 de Los Angeles, y con 3DS como modelo del que aprender de los errores, fuentes cercanas a Nintendo aseguran que la compañía estaría estudiando cambiar el nombre de su nueva consola de sobremesa para evitar confusión entre los usuarios.
Según parece, el gran público ha tenido dificultades para entender las diferencias entre Nintendo DS y su sucesora, 3DS, motivando a Nintendo a actuar sobre la marcha añadiendo más y más diferencias en los anuncios televisivos para que la gente entendiera que se trataba de dos consolas diferentes, con mensajes del tipo: "Esto no es DS. Es una Nintendo 3DS".
Y son este tipo de problemas de imagen los que supuestamente estarían empujando a los directivos de Nintendo a cambiar el nombre de su nueva consola, Wii U, por otro que no genere confusión entre el gran público. Una decisión difícil teniendo en cuenta que una de las virtudes de esta consola es que aprovechará gran parte de la imagen pública y accesorios de la exitosa Wii.
Hoy mismo se ha confirmado que la consola se estrenará en Japón, Norteamérica y Europa a finales del presente año, aunque todavía son muchas las incógnitas que rodean a la nueva consola de Nintendo.