El día que se apagó la llama de los Juegos Olímpicos y alguien decidió encenderla con un mechero

  • Ocurrió en Montreal en 1976 tras una intensa lluvia que apagó la llama olímpica

  • Hay un complejo sistema detrás del encendido y el mantenimiento de la llama

Llama Olimpica
Sin comentarios Facebook Twitter Flipboard E-mail

La llama de los Juegos Olímpicos que llegará a París para inaugurar los juegos de 2024 no es un fuego cualquiera. Para encenderla se han utilizado espejos parabólicos que, valiéndose de los rayos del Sol, ha hecho que ese fuego gane una connotación de pureza y elemento sagrado que no tendría de haberse encendido con un simple mechero, pero lo cierto es que eso mismo fue lo que ocurrió en una ocasión.

El complejo sistema que hay detrás de la llama olímpica hace que ese fuego sagrado se mantenga encendido gracias a un sistema de propano capaz de mantener la llama viva incluso frente a lluvias y vientos de 70 kilómetros por hora, pero por si las moscas, por si ocurriese una catástrofe capaz de llegar a apagar el fuego de los Juegos Olímpicos, de esa llama inicial se encienden además otras dos linternas que permanecen a buen resguardo por si fuese necesario utilizarlas.

Cuando se encendió la llama olímpica con un mechero

Cuando la llama llegó a Montreal en 1976 para la celebración de los Juegos Olímpicos en la ciudad canadiense lo hizo en perfectas condiciones, pero varios días después tras la ceremonia inaugural, durante uno de los días en los que no había actividad en el estadio olímpico, una durísima tormenta consiguió extinguir la llama.

La suerte quiso que uno de los trabajadores de mantenimiento que estaba por allí presenciase lo ocurrido y, cuando la lluvia amainó, decidió aprovechar su pausa para el cigarro para encender de nuevo la llama. Sin embargo, lejos de hacerlo con una de las linternas encendidas para esa tarea, aprovechó su mechero personal y hojas de papel de periódico que fue echando en el caldero hasta que la llama se volvió a encender.

Pese a creer que había salvado el día, cuando la organización se enteró de lo ocurrido no tardó en extinguir de nuevo la llama para reencenderla valiéndose de la llama olímpica que guardaban a buen recaudo en las linternas secundarias. Pese a que ahora la historia de ese trabajador canadiense es una de las típicas curiosidades graciosas de los Juegos Olímpicos, para nosotros siempre será el héroe que salvó la llama con un mechero.

Imagen | Gmazenko en Midjourney

En 3DJuegos | El 34% de los empleados confirma que el teletrabajo se ha eliminado o reducido de su empresa según un estudio reciente

En 3DJuegos | Han hackeado el móvil de Sydney Sweeney mediante SIM swapping demostrando una vez más que es un peligro para nuestros datos privados

VÍDEO ESPECIAL

946 visualizaciones

20 JUEGAZOS INFRAVALORADOS de NINTENDO SWITCH

Nos zambullimos en el catálogo de Nintendo Switch para descubrirte varias joyas ocultas que quizás habéis pasado por alto.