Wii destacó por ser una consola a la que le encantaba albergar fiestas de todos los tipos, tanto las mejores como las peores. La presente fue una de ellas, y Bandai Namco ha querido que vuelva a repetirse en Nintendo Switch, algo que le puede venir bien dada la escasez de este tipo de propuestas party. Lo valoramos con este análisis de Go Vacation.
Hay muchos aspectos criticables en Go Vacation. La principal es que sus minijuegos resultan muy sencillos y apenas presentan reto. No brilla especialmente por su apartado audiovisual, y luego hace gala de una serie de defectos que lo alejan de grandes referentes del género party. Sin embargo, tiene algo que me fascina… que hace que valga la pena: posee un pequeño entorno abierto, con distintas zonas, en una isla de diversión tematizada.
En el momento en que descubrí su multijugador local para hasta 4 participantes, y que todos podían moverse libremente en su pantalla, disfrutando de ese amplio entorno, comprendí que la obra de Bandai Namco tenía algo de especial. No se ve todos los días. Eso de poder trasladarte en jeep, monopatín, quad o moto acuática a cada una de las pruebas no es habitual en los videojuegos party, y creedme que es lo que más se disfruta en este videojuego: la sensación de estar compartiendo unas vacaciones virtuales con tus colegas.
Es cierto que la isla Kawawii ya la vimos hace unos años en Wii, una plataforma que fue conocida por la abundante cantidad de videojuegos de corte familiar. Sin embargo, llevarlo al catálogo de Nintendo Switch no ha sido un error. Sin ser el mejor representante del género, ayuda a rellenar un hueco en la consola de Nintendo, resultando interesante para aquellos que no lo descubrieron en su día. Su calidad está lejos del sobresaliente, pero resulta interesante como título party, principalmente debido a la escasez actual de este tipo de propuestas.
Minijuegos en libertad
No voy a empezar hablando de minijuegos, sino de la que considero que es la principal baza de Go Vacation: su multijugador a pantalla partida para hasta 4 jugadores, tanto en modo sobremesa como portátil. Por supuesto, se puede jugar en solitario, y hasta así se defiende considerablemente bien. No obstante, si venís aquí es para compartir diversión, y por eso mismo el título brilla cuando varios usuarios se unen sujetando sus respectivos Joy-Con en horizontal (también se puede usar el Switch Pro Controller).
El título está preparado para ello. Los minijuegos son lo suficientemente sencillos como para que sea únicamente necesario interactuar con un par de botones. Sin embargo, el verdadero punto fuerte es el que os comentaba al principio: la capacidad de explorar libremente el entorno. Hay disponibles cuatro zonas (mar, montaña, nieve y ciudad), cada una con sus actividades específicas. Es decir, enclaves tematizados en los que puedes moverte usando vehículos como buggies, cabellos, patines en línea…
La magia está en ese detalle: en que es un juego party en que puedes ir de un lado a otro con tus amigos en tiempo real y decidir cuál es el próximo minijuego a realizar. Por desgracia, las cosas a realizar en dicho mundo son limitadas, y no van más allá de conversar con algún NPC, encontrar algún cofre o sacar fotos a las más de 40 especies animales que se incluyen. El grado de interacción es muy primitivo, pero es justo reconocer la valentía de Go Vacation. Se agradece.
Su principal baza es el multijugador a pantalla partida para hasta 4 jugadores
Aparte, incorpora un par de elementos adicionales. El más sorprendente es la posibilidad de adquirir tu propio terreno para crear un hogar. A medida que superamos minijuegos en la aventura principal, podremos obtener más mobiliario con el que personalizarlo. Adicionalmente, hay una serie de retos diarios que animan a visitar el juego periódicamente, así como un sistema de subida de nivel. Todos estos elementos son poco habituales en este tipo de lanzamientos, y por eso es preciso destacarlos.
Ojalá toda esta inventiva se hubiese aplicado a los más de 50 minijuegos disponibles. En realidad, son el núcleo de la experiencia, pero en Go Vacation no gozan de la dedicación requerida. Son tremendamente sencillos, fáciles y a veces resultan monótonos. No suelen salirse de lo habitual: partidos de voley, carreras, salto de esquí, ala delta… pero lo peor es que no resultan especialmente divertidos. Carecen de ritmo en su mayoría, y aunque a veces denotan cierta dedicación (hockey de mesa) y ganas (combates de pistolas de agua), casi todo resulta demasiado convencional.
No hay grandes incorporaciones con el motivo de la llegada del videojuego a Nintendo Switch. Lo más significativo es la evolución en resolución (HD), pero en lo referente a detalle visual, se mantiene el tono tan austero del lanzamiento original. También por parte del plano sonoro, el apartado menos agraciado al hacer sonar melodías muy funcionales, sin personalidad alguna.
Pero lo dicho. Dadas las circunstancias, y que Nintendo Switch escasea en este tipo de propuestas, la llegada de Go Vacation es bienvenida. Además, posee buenos atributos. Sus minijuegos son bastante mejorables, pero su estructura de libertad en un entorno abierto, unido al multijugador a pantalla partida, pueden hacerte pasar buenas horas junto a tus amigos. Si eso es lo que buscas, puede que estas vacaciones te sientan bien.
Go Vacation no es mala opción como videojuego party, sobre todo si consideramos la escasez de alternativas en Nintendo Switch. Su núcleo central, los minijuegos, debería ser más contundente, pero tiene a su favor la capacidad de explorar libremente una isla con varias zonas, así como un multijugador local a pantalla partida para hasta cuatro participantes. Esto, unido a la considerable cantidad de secretos que contiene, lo convierte en un título a tener en consideración por aquellos que, siempre sin demasiadas pretensiones, quieran celebrar una fiesta party en su consola.
Comprar Go Vacation- Libertad de exploración en un entorno abierto
- Multijugador a pantalla partida para hasta 4 jugadores
- Buena cantidad y variedad de minijuegos, con distintas temáticas
- Algunos elementos accesorios que expanden la profundidad del juego
- Poca inventiva en los minijuegos, que además son demasiado sencillos
- Muy austero en términos audiovisuales
