Estamos acostumbrados, lamentablemente, a ver cómo los juegos online se llenan poco a poco de hackers y malos jugadores. Es un problema que solventar en los diferentes nuevos y viejos lanzamientos, especialmente aquellos más cooperativos como Apex Legends. Y es que, la seguridad del shooter battle royale de Respawn Entertainment ha sido puesta en duda tras el hackeo de dos jugadores profesionales en medio de una competición oficial y en el marco de una ola de recortes y despidos por parte de EA.
Rara vez hablamos de problemas y hacks en eventos oficiales, pero no son raros de ver. El incidente se produjo durante la cuarta partida de la Apex Legends Global Series, cuando Genburted, del equipo DarkZero, mencionó con sorpresa cómo en su pantalla aparecía una interfaz cuestionable que le permitía ver a través de las paredes, así como una ventaja en su apuntado que le ofrecía una clarísima superioridad frente a los demás.
Dos hackeos en una competición oficial de Apex Legends
Sí, hablamos de los clásicos aimbot y wallhack, dos trampas ampliamente usadas en este medio de entretenimiento. Sin embargo, Genburted no parecía ser el artífice de este problema y, de hecho, optó por permanecer en una habitación para evitar hacer trampas y finalmente abandonó el juego tras comunicarlo a la organización.
El caos no terminó ahí. Esta partida fue reiniciada y en ese mismo momento ImperialHal, un jugador destacado de TSM, fue el objetivo de un segundo hackeo bajo los mismos métodos: walhack y aimbot. Aunque intentó seguir jugando, pronto se dio cuenta de que su precisión había sido manipulada y sus compañeros de equipo le instaron a abandonar la partida.
Poco después, y tras ver que no conseguían tirar abajo la competición, los piratas utilizaron las cuentas de ambos jugadores para enviar mensajes al canal general, adjudicándose estas acciones y sembrando aún más la discordia entre Respawn Entertainment y su comunidad. Una situación polémica que, finalmente, llevó a posponer la final norteamericana ante la comprometida integridad del evento.
A pesar de la rápida respuesta de los organizadores, los jugadores expresaron su frustración y descontento en redes sociales, exigiendo medidas más eficaces contra la piratería y mejores sistemas de protección en el juego. "¡EA, arregla esta mierda y consigue un anticheat mejor!", mencionó Genburten en Twitter. Un incidente que ha dejado a la comunidad del shooter con una sensación de preocupación y urgencia por abordar los problemas de seguridad en el juego competitivo.
Sin embargo, y como comentan los compañeros de GameStar, la compañía detrás de Easy Anti-Cheat, el software anti-trampas del shooter, se lava las manos. Tras llevar a cabo las investigaciones apropiadas, están absolutamente seguros de que "no existe ninguna vulnerabilidad" que nos haga llevarnos las manos a la cabeza.