La distribuidora sigue litigando con Electronic Arts.
Hace ya unos meses que informábamos de la demanda interpuesta por Activision contra Electronic Arts en referencia a la adquisición por parte de esta última de los derechos de distribución de Brutal Legend.
Pues bien, Activision ha dado algunos pasos hacia delante presentando una nueva demanda contra Double Fine, en esta ocasión, alegando que son ellos quienes poseen el contrato válido para poner a la venta en un videojuego en el que han invertido 15 millones de dólares y que, por supuesto, quieren de vuelta.
Hasta aquí más o menos lo sabido, salvo la excepción de la revitalización del proceso, seguramente por lo inminente de la puesta a la venta del videojuego. Sin embargo la nueva demanda podría amenazar precisamente la fecha de lanzamiento del título, no necesariamente por que éste no vaya a salir al mercado, sino más bien porque de vencer Activision podría salir bajo su sello y unos meses más tarde.