Hay un jefe en Flintlock: Siege of Dawn que suponer un punto de inflexión, imagino. Al menos lo parece, aunque no por su presencia, porque lo cierto es que en Flintlock hay muy pocos jefes que impacten por su diseño o tamaño. El caso es que se le ve algo más trabajado que los que te has encontrado hasta entonces, que parecen enemigos comunes con una barra de vida más grande. Este tiene algunos patrones que tendrías que aprender. Pero Flintlock tiene un combate algo tosco, y cuesta ajustarte a él porque no hay cancelaciones de movimientos y tus animaciones te dejan muy vendido. Así que en una ocasión que estaba muriendo demasiado (para un juego que tampoco considero excesivamente difícil) cambié a la táctica milenaria de machacar el botón de ataque. Eso es. En vez de tratar de esperar el fallo y dar unos golpes, simplemente, atacar sin piedad.
Me sobraron pociones y todo y el jefe cayó a la primera vez que hice esto. Desde entonces, utilicé esta fórmula con muchos enemigos duros y con buenos resultados. Los enemigos con escudo son especialmente difíciles y habría que aprovechar varias mecánicas del juego, como la magia o la contra con el arma para encontrar una abertura, pero si machacas el botón terminas aturdiéndolos y consigues arrebatarles el escudo. Todo esto denota que, lamentablemente, Flintlock no es el juego más refinado en lo que es su punto más importante: el combate.
Y a veces he tenido la sensación de que esto se debe a una visión no del todo clara por parte de A44, creadores de Ashen. Se nota incluso en su campaña posterior, en la que anunciaron el juego como un soulslite (es decir, un juego con combate tipo souls pero más piadoso con el jugador), pero luego corrigieron rumbo en redes sociales diciendo que no lo era tanto. Que era mucho más que eso. Quizá por miedo a alienar a otro tipo de jugador interesado en el juego.

La realidad es que es ambas cosas. Es un título con una clara estructura Souls, con tus pérdidas de experiencias, puntos de guardado en localizaciones concretas y combate en torno a un fijado de enemigos. El problema es que, aunque se esmera por hacerlo variado con un gran abanico de armas de corto alcance, de fuego y algo de magia con un personaje secundario, el tacto y la respuesta que ofrece el combate al jugador no es nada buena. Como decía antes, las animaciones te dejan tan vendido, los ataques interrumpen tan poco, que es difícil tratar de "jugar bonito" y más rentable ser eficiente.
Hay ideas interesantes, pero el combate nunca termina de despegar.
Y es algo más que un juego tipo souls, porque también quiere que explores su mapa de otras formas. No es un mundo abierto, pero hay zonas grandes conectadas y mucho salto, doble salto y dash para llegar a lugares altos y recónditos. Funciona y ayuda a conseguir la experiencia y los materiales para que el combate sea aún más sencillo si cabe, mientras que permite desbloquear una serie de atajos que, a través de unas fisuras, podemos desplazarnos rápidamente por el nivel para no tener que tardar tanto en llegar a los mismos sitios si nos derrotan.

La guerra de la pólvora
Flintlock cuenta la historia de Nor Valek en una eterna lucha contra los dioses. Tras un conflicto en una fortaleza de la que no dejan de aparecer criaturas y que puede cambiar el transcurso de la guerra, los soldados del Ejército de Coalición abren una puerta que no deberían y terminan empeorando las cosas, haciendo que el mal de estas criaturas se propague y las rencillas entre los distintos humanos se hagan más virulentas. Mientras tanto, Nor aúna fuerzas contra el único dios que toma partido por los humanos: Enki; una divinidad con forma de zorro que nos acompañará y luchará junto a nosotros.
Explora vertientes del soulslike a la que deberían de aproximarse más juegos.
Hay un punto interesante en el trasfondo de Flintlock, pero no termina de despegar del todo, quizá porque no todas las misiones secundarias son capaces de resultar lo suficientemente atractivas para que nos interesemos por él. Pero se nota que tampoco es una historia (o más bien una ambientación) de relleno. A44 normalmente se centra en entornos naturales y algunos poblados que tendremos que liberar, pero a veces sabe crear niveles ejemplares, como una mina que tiene más impacto narrativo que el que suele tener estos lugares o el más interesante: una ciudad tomada en el que han conseguido que, bajo una fórmula tipo souls, se junten los NPCs con los enemigos de forma natural y se cree algo distinto a la hegemonía de "mundo muerto" del soulslike.
El problema es el mismo desde el principio, sin embargo, y por eso lo he ido tratando desde el primer párrafo. Es como un fantasma que te persigue por todo el juego y por todo este análisis: sí, hay cosas interesantes en Flintlock, pero todo queda lastrado por un combate que nunca termina de despegar. Tampoco ayuda la excesiva accesibilidad de algunas mecánicas y la falta de la misma de otras. Por ejemplo, el juego usa un punto guía para decirte siempre donde debes ir, y ayuda muy poco a perderse por el escenario y comprenderlo bien. Los beneficios de recorrerlo a conciencia se traducen en mejores armas, más experiencia o materiales que son aburridísimos de buscar, pero necesarios para la mejora de tu equipo.

No es un mundo abierto, sino un mundo interconectado que explorar
Técnicamente, también hay algo de cal y de arena. Algunas zonas se ven bien y el juego luce lo suficientemente atractivo para llamar tu atención. Pero también se nota que hay lugares más trabajados que otros. Hay zonas cuya iluminación es muy genérica e incluso afecta a la detección de los enemigos. Lo cual es un problema mayúsculo cuando hay un tipo de enemigo que explota a los dos segundos de acercarte a él y acaba con toda tu vida de un plumazo.
Pero, con todo, sabe hacerse con una personalidad propia. Se nota que hay mucha de esa orografía de Nueva Zelanda que ayuda a dar una buena sensación de escala y de verticalidad que le sienta bien al juego, haciendo más creíble la distribución en zonas grandes y escarpadas. Técnicamente solo puedo hablar de la versión de PC, que es a la que he jugado, y con la que no he tenido muchos problemas con una RTX 4070 Super. Para que os hagáis una idea, casi podía jugar rasterizado a 4K, pero daba algunos saltos que he corregido usando DLSS de calidad para mantener la tasa siempre estable.
Creo que Flintlock: Siege of Dawn es un juego interesante, pero no me ha llenado como para acercarme a darle el recomendado. Me gustan sus principios, ojo. Creo que explora vertientes del soulslike a la que deberían de aproximarse más juegos, porque no todo tiene que ser ni tan oscuro, ni tan carente de vida. Pero creo que a un título centrado sobre todo en la acción y el combate siempre hay que pedirle que este sea consistente, por no hablar de una muy escasa variedad de enemigos y, sobre todo, patrones en la lucha. Si fuera algo más híbrido como un juego de acción y aventura o un RPG, creo que se llevaría mejor, pero el porcentaje que A44 dedica a la batalla es el suficiente como para haber cuidado más este aspecto.
Flintlock: Siege of Dawn es un juego interesante ya que presenta un sistema que bebe de las fuentes del soulslike, pero que la diluye para acercarse a una versión con más exploración, verticalidad y plataformas. Tiene ideas llamativas y es visualmente atractivo, pero el combate no está tan pulido como me gustaría. Sencillamente, sin estar mal, no transmite la mejor respuesta a los mandos. Junto a la poca variedad de enemigos y patrones, se queda demasiado en tierra de nadie para ser el núcleo central del juego.
Comprar Flintlock: Siege of Dawn- El juego nos sumerge en un conflicto eterno con los dioses.
- Tiene estructura de soulslike, pero más ligera y mezclada con juego de aventura y exploración.
- El combate es la parte principal, pero podría estar más pulido.
- Escenarios interesantes, con verticalidad e inspiración en Nueva Zelanda.
- Le hace falta más variedad de enemigos, jefes y patrones de combate.
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21 comentarios
botelladelayer
La pregunta tiene historia ...? si es asi al menos sera entretenido y no un soulslike mas.
Devil-17
Una pena porque el trailer se veia muy bien. Pero cuando probé la demo me echo para atrás el sistema de combate que se queda en medio de un souls like y un juego de accion sin nada bueno de ambos.
edpema78
Pues yo lo estoy jugando y está muy decente, el combate no me parece malo. Es más, hay análisis que valoran el juego muy positivamente.
ruby12345
Yo estoy jugándolo gracias a Game Pass y he de decir que me ha decepcionado, pero lo seguiré jugando porque, aunque no es lo que me esperaba, lo estoy disfrutando... De momento. Aunque claro, lo estoy jugando tras pasarme Lies of P (juegazo), y es un paso atrás, en mi opinión.
bmiquel
Sinceramente, yo con solo ver los primeros vídeos y el tráiler ya vi que el combate era muy tosco. Incluso el movimiento del personaje no me acaba de convencer. No se que esperaban.
hertin44
Esta joya se viene a casa.
sevistyle
No da ni para probarlo en el Game pass,desde que vi el gameplay de hace un par de años ya se veía feo y esto termina de confirmarlo,un juego que no va a vender un mojón y incluso gente que teniendo para pasárselo gratis no hará el intento de descargarlo por no ocupar espacio para borrarlo luego.
Titanportex2
vamos cuesta 35 pavos que si fuera un estudio reconozido te lo clavan en 69, que a ese precio ya que no tengo prisas por 20-25 horas una maravilla y se agradece espero vendan bastante por ahora no lo compro porque ando 2-3 juegos que ni e tocado pero vamos me interesa directo a la wishlist
Reybahg
Está en el gamepass de estreno.
KainusDraco
Sweet baby no tengo que decir nada más.