Hoy en día, podemos decir sin temor a equivocarnos que Metal Gear es una de las sagas más icónicas de toda la industria de los videojuegos. Sin embargo, a Hideo Kojima le costó mucho conseguir la aprobación de Konami para desarrollar la primera entrega de la franquicia; de hecho, los también dueños de Silent Hill no estaban muy convencidos con la idea de hacer un juego de guerra cuyas mecánicas se centraran en el sigilo. Por suerte, la compañía cambió de parecer solamente con un detalle que ahora forma parte del ADN de la marca: el signo de exclamación.
Esta historia la conocemos gracias a Shmuplations, web que está recuperando entrevistas realizadas a diseñadores japoneses hace más de 20 años. En esta ocasión, el portal ha traducido una conversación con Kojima que fue publicada por el medio Nice Games allá por 1999; charla casi perdida en el tiempo que nos ha dado la oportunidad de conocer un poco más sobre la historia detrás del desarrollo del primer Metal Gear.
"No puedo hablar sobre esto sin llorar (ríe). Konami dijo que quería un juego hecho alrededor de la temática de 'guerra'. Pero el desarrollo tuvo una historia accidentada", comenzaba el creativo nipón. "Varios desarrolladores veteranos de Konami, que lanzaron muchos hits antes de que yo entrara en la compañía, estuvieron trabajando en este juego de guerra durante dos años. Pero no estaba yendo a ninguna parte: ellos creaban algo, después lo descartaban, creaban algo, lo descartaban de nuevo. Había una especie de leyenda en Konami de que, si te involucrabas en ese proyecto, acababas degradado o transferido (ríe). No tengo ni idea de por qué continuaban, pero creo que, como compañía, Konami realmente quería un juego de guerra".
"Así fue como el proyecto me vino a la cabeza. Ahí es donde empezó. Lo que estaba obsesionado con hacer, con el enfoque de juego de 'guerra', era un juego de escape. ¿Conoces esa película antigua, La gran evasión (The Great Escape)? Pensé que sería increíble hacer un juego diseñado alrededor de un concepto así, de intentar escapar de alguna parte", continuaba Kojima. Sin embargo, a ningún directivo de Konami le gustaba la idea y desdeñaban los intentos del creativo nipón por llevarla a cabo. "Yo aún era un nuevo planificador en Konami, así que supongo que nadie estaba inclinado a escuchar lo que dijera… Simplemente no había motivación desde el principio. Era como, ¿qué tengo que hacer aquí? ¿Tengo que empezar a golpear a la gente? (ríe)".
Por suerte, un compañero veterano escuchó a Kojima y le ayudó a presentar su idea ante los directivos de la empresa. "Por supuesto, todos tenían sus dudas sobre la premisa básica. Preguntaban, '¿un juego de escapar realmente será divertido…?'. Pero, en cuanto pusimos la build en funcionamiento y vieron aparecer el símbolo de exclamación cuando te detecta el enemigo, eso vendió el concepto. Todos cambiaron su tono: '¡Esto va a funcionar!'".
Metal Gear, Death Stranding, OD…
Gracias a esta presentación, Kojima logró encabezar el desarrollo del primer Metal Gear; saga que no haría más que crecer en popularidad a lo largo de sus entregas subsiguientes. Y este no fue más que el primer gran paso del creativo en la industria de los videojuegos; un movimiento que dio pie a Death Stranding y proyectos futuros como Death Stranding 2: On the Beach, OD con Microsoft y Physint con Sony. Una carrera estelar que ha reunido a millones de fans en todo el mundo.
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