La ciencia-ficción es esto. Hay algo en su literatura que debe no solo hacer volar tu imaginación, sino también tu conciencia. Cada vez que te enfrentas a un mundo en el que contrasta la alta tecnología con el bajo nivel de vida, por ejemplo, no se debe recrear uno solo en la estética, sino en lo que hay bajo la superficie. Y Minds Beneath Us lo hace a la perfección. Apunta su cámara siempre a los personajes, a sus miedos, aspiraciones y creencias. Consigue siempre darte una pequeña dosis de información que te anima a armar el puzle en tu cabeza, en vez de dártelo todo mascado. Si quiere hablarte de la Inteligencia Artificial y cómo esta gestiona la sociedad, no te da una explicación digna de Wikipedia y la pone en boca de un personaje. Te presenta, por ejemplo, una situación en la que el despido es regulado no por un jefe, sino por la IA, de manera que esta puede revocar la decisión de un superior. Te hace preguntarte qué piensas ante la frialdad y precisión de una máquina o la cercanía y volatilidad humana. Eso es la ciencia-ficción. Al menos, la buena.
Minds Beneath Us tiene como mínimo tres lecturas. Tres líneas narrativas. Las hay más introspectivas y también más comerciales. Esta última es la típica historia que podrías ver en un videojuego, lleno de giros, misterios y sorpresas acerca de qué esta ocurriendo con el personaje principal y las capacidades extraordinarias que poseemos. Pero, aunque he disfrutado de esta trama, lo he hecho mucho más de la que nos permite conocer la ciudad de Taipei y a sus personajes a través de esta empresa llamada Vision.
Como nuevo trabajador, vamos a entender cómo funciona realmente estas "granjas de flops", como las llama el juego. Te aconsejo que no leas sobre ello y dejes que el juego te lo cuente poco a poco, como se merece, para que descubras el concepto detrás de estas palabras. Pero sí te puedo decir que, en esta ciudad en decadencia, que incluso va a ser elevada a una plataforma por la subida del mar debido al cambio climático (dejando algunos barrios abandonados; de clases bajas, por supuesto), hay tal superpoblación y escasez de oportunidades que la gente se ve obligada a aceptar un nuevo tipo de empleo, que gestiona esta empresa.
Las raíces de nuestra sociedad
Si me centro tanto en la historia es porque Minds Beneath Us es cien por cien historia. Aunque no lo parezca por sus imágenes, es prácticamente una novela visual, solo que abandona el clásico plano estático en primera persona para construir un escenario tridimensional con personajes 2D que podemos navegar en perspectiva horizontal. El desarrollo es similar, por ejemplo, al visto en juegos como A Space for the Unbound. Aunque nos movemos con control directo del personaje, se le une una mecánica heredada del point and click para poder explorar algunos objetos y abrir opciones de diálogo, pero lo cierto es que son muy pocas las veces que la usa el juego para actos concretos y, en cierto modo, el juego no anima del todo a pararte a buscar sus hotspots por el escenario.
La verdadera mecánica de Minds Beneath Us es, sin duda, la toma de decisiones. Sí, no busca multitud de finales en los que las cosas cambian drásticamente según todas las elecciones que hagas, pero sí que logra ir más allá de la mera ilusión para estar siempre reaccionando a tus decisiones, añadiendo o cambiando diálogos en consonancia. Durante toda la partida, el jugador se siente escuchado y muy partícipe de la narración. Va más allá, porque al juego le gusta mucho probarte, como cuando en un trabajo te dejan solo por primera vez, para ver cómo te desenvuelves.
¿Y los personajes? No solo son interesantes, sino que además son abundantes. Minds Beneath Us consigue crear un verdadero micro-universo alrededor de esta empresa llena de momentos cotidianos, con personajes que tienen sus propias opiniones y perspectivas sobre la labora en la empresa. Lo interesante aquí es que consigue su propósito: humanizar el mal. Imagina que vas a trabajar a la Estrella de la Muerte. ¿Crees que todos sus trabajadores estarían riéndose a carcajadas por los pasillos y hablando de destruir el mundo? (Una idea que, por cierto, explora en parte Andor y por eso es tan buena). En el caso de Minds Beneath Us, tus compañeros de trabajo tienen sus propias opiniones sobre la labor que hace la empresa y su aportación a la sociedad, así como la importancia de la gestión de la IA y las megacorporaciones.
Minds Beneath Us es una obra muy filosófica. Se le nota. Cuando menos te lo esperas, sienta a sus personajes para establecer un debate moral sobre la situación de la empresa, la justificación de las acciones o la responsabilidad individual. Hasta se le escapa el famoso dilema del tranvía en cierta ocasión. Hace bien, porque su mundo es una ametralladora de ideas que arroja a la cara del jugador y no se detiene en ningún momento, haciendo lo que debe hacer una obra del género: reflexionar al jugador; trasladar los temas que se presentan en este universo de ficción a nuestro propio mundo para tener una idea más clara de nuestros principios y valores. Pese a la sencillez de su propuesta jugable, hay un océano de profundidad narrativa que no deja escapar ningún diálogo ni oportunidad para hablar de una consecuencia de este futuro no tan distante. Y sí, como es una novela visual aunque, como he comentado, bien camuflada (tiene hasta alguna pequeña secuencia de acción) y encima está en inglés, no serán muchos los que la descubran, aunque creo que el boca a boca ya está funcionando y sus valoraciones en Steam son cada vez más y muy positivas. Quizá eso la hará más especial, porque si eres uno de los que se lanzan a probarla, vas a descubrir por qué las buenas historias de ciencia-ficción funcionan.
Minds Beneath Us es, sin duda, una de las mejores historias de lo que va de año y también de las mejores que puedes disfrutar en el terreno de la ciencia-ficción cyberpunk. Nuestro protagonista no solo esconde muchos secretos, sino que su nuevo trabajo en la granja de flops de la corporación Vision retrata un viaje para entender hasta qué punto puede caer el valor de la vida humana en una sociedad superpoblada y decadente. Se trata de una novela visual muy atípica, porque su estructura nos permite ver a nuestro personaje y movernos en un entorno tridimensional con perspectiva horizontal. Su mecánica principal es la toma de decisiones, muy bien planteadas para hacer realmente partícipe al jugador de la historia.
Comprar Minds Beneath Us- Una de las mejores historias de lo que va de año.
- Cyberpunk centrado en multitud de temas: IA, desigualdad social, bioética, control mental...
- Muchas pequeñas decisiones que logran hacer partícipe al jugador en todo momento.
- Es una novela visual, pero con una perspectiva distinta, pudiendo controlar directamente al personaje.
- Profundiza como pocos juegos en una gran cantidad de personajes secundarios.
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