
Es más ligero, incluirá un sensor de movimiento de 360 grados y sonido integrado.
Durante la celebración de la conferencia de desarrolladores Oculus Connect, el equipo a cargo de las gafas de realidad virtual Oculus Rift ha presentado el último prototipo de este dispositivo, que responde al nombre de Crescent Bay.
Ha sido el máximo responsable del estudio, Brendan Iribe, el encargado de dar a conocer este nuevo prototipo, que entre otras mejoras se presenta con un sensor de movimientos de 360 grados y sonido integrado, con un avance tecnológico comparable al que vivimos con el salto de los primeros kits de desarrollo al más reciente DK2 de Oculus Rift.
Mayor resolución y una mejor tasa de refresco para las imágenes son también otros de los avances de Crescent Bay, que además resulta más ligero que sus antecesores.
Por el momento no hay planes para distribuir este nuevo prototipo, que hasta nuevo aviso solo se podrá probar durante el evento Oculus Connect en California.