Es una prueba heroica que podemos encontrarnos de casualidad pero necesitaremos sí o sí una flecha eléctrica para completarla
Hay algunos de los Santuarios de Zelda: Breath of the Wild que forman parte de una prueba heroica pero que en ocasiones podemos llegar a hacerlas sin ni siquiera saber que forman parte de una. Es el caso del Santuario de Ahiku, el cual está englobado dentro de una prueba heroica, la de los 'Signos del Acantilado' y en esta guía os explicamos cómo superarla.
Prueba heroica 'Signos en el acantialdo'
A lo largo del día, Geggle, un habitante de la posta de Tabanta, en la región de las Colinas de Hyrule, se sube a un montículo que hay al sur de la posta para contemplar un accidente geográfico que hay en la cordillera de Gerudo, donde hace 100 años el Rey de Hyrule mando excavar para descubrir artefactos sheikah para prevenir el cataclismo. Le llama la atención el hecho de que no parezca una formación natural
A pesar de su curiosidad, es demasiado altivo como para ir a investigarlo y nos lo encarga a nosotros. Así es como empezamos la prueba heroica de 'Signos en el acantilado', y lo más laborioso de ella es tener que llegar al punto que nos ha indicado. Deciros aquí que si no lleváis una flecha eléctrica encima ni os molestéis en empezar el recorrido, porque la vais a necesitar; mejor os hacéis con algunas primero.
Accediendo al Santuario de Ahiku
La subida hasta la zona en la que se encuentra lo que llamo la atención de Geggle no es complicada, ya que la colina es empinada pero no requiere que escalemos. Eso sí, tened cuidado con los enemigos que hay en los andamios y puentes que quedan de las antiguas excavaciones. Es posible que traten de atacar a Link tirándole piedras, aunque son fácilmente esquivables.
A medida que nos acerquemos a la zona elevada, las temperaturas irán descendiendo, así que toca protegerse del frio. Algo positivo, hay una corriente de aire ascendente justo antes de llegar a la elevación sobre la que se encuentra el punto al que queremos llegar. Abriendo la paravela sobre ella la alcanzaremos con facilidad. Cuando leguéis arriba, veréis que en la pared hay un pedestal de santuario y un símbolo del rayo que lo rodea. Hay que disparar una flecha eléctrica al centro.
Al hacerlo el Santuario de Ahiku emergerá de la tierra y podremos activarlo para teletransportarnos a el si lo deseamos y para abrirlo y reclamar sus tesoros.
Como siempre, estamos hablando del símbolo de valía que Link debe recoger para completarlo e incrementar sus corazones o resistencia si dispone de otros tres, y de un tesoro adicional a modo de recompensa por completar la prueba heroica. En el interior del cofre hallaremos un diamante.
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