World of Warcraft es un juego eterno. El MMO de Blizzard lleva nada menos que 20 años en marcha y no parece que vaya a frenar sus ambiciones ni cambiar de rumbo dos décadas después. Hay millones de jugadores aún enamorados de su mundo de fantasía y, de hecho, fueron ellos quienes convencieron a Bobby Kotick, exdirector ejecutivo de Activision Blizzard, de no subir el precio de la suscripción a World of Warcraft, ya que esto podría haber generado un fuerte rechazo en la comunidad.
Kotick ha sido una figura polémica, muy polémica de hecho. El ejecutivo estadounidense, que dirigió Activision Blizzard desde 2008 hasta 2023, fue apartado tras la compra de la compañía por parte de Microsoft. Durante su gestión, protagonizó momentos incómodos para la gigante norteamericana, enfrentándose a controversias relacionadas con la monetización de juegos, acusaciones de abuso de poder por parte de empleados y varias demandas por acoso sexual contra directivos de Activision Blizzard, situaciones que, según informes, ocultó durante años.
Sin embargo, el mismo Kotick fue el responsable de que WoW no aumentara el precio de su suscripción ni un euro. Aunque el MMO experimentó una subida de precios en Australia y Nueva Zelanda a comienzos de este año debido a "ajustes en los mercados regionales", el exejecutivo afirmó durante su participación en el podcast Grit que entendía que los jugadores de MMORPGs son extremadamente protectores con sus juegos. "Cualquier intento de modificar el precio podría haber generado una reacción negativa que no queríamos", explicó Kotick.
Kotick quiso mimar el MMO y a su equipo porque era quien daba beneficios
El momento más complicado de su gestión se produjo en 2008, cuando Activision se fusionó con Vivendi Games y la compañía enfrentaba un balance financiero negativo en la mayoría de sus proyectos, dependiendo casi exclusivamente de World of Warcraft para mantenerse a flote. Por ello, en lugar de subir el precio de la suscripción, su estrategia con el MMO fue expandir el modelo de negocio mediante la introducción de servicios adicionales y contenido opcional, además de respaldar al equipo de desarrollo para que continuara trabajando con estabilidad.
El resultado fue evidente, y Kotick destacó que esta estrategia convirtió a World of Warcraft en el negocio de suscripción más exitoso de todos los tiempos, con aproximadamente 150 millones de jugadores a lo largo de su historia, cada uno pagando una cuota mensual. Sin embargo, también reconoció las limitaciones del modelo, señalando que muchos jugadores "envejecían", tenían hijos o simplemente dejaban de tener tiempo para jugar, lo que afectaba la retención de usuarios a largo plazo.
Cuando el presentador del podcast sugirió que WoW podría haber aumentado su suscripción para obtener más ingresos, Kotick rechazó la idea, insistiendo en que su enfoque siempre fue ofrecer servicios adicionales en lugar de subir el precio base. "Es una comunidad sensible, no quieres hacer demasiado para estresarlos", concluyó.
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Rancid1989
Blizzard está tan podrido que este tío va a acabar pareciendo hasta un santo. En fin.
Hace poco leía posts de usuarios que decían que el precio de las sub debería subir dándose la razón entre ellos. Así nos va.