Elon Musk sorprendió al mundo hace escasos días cuando celebró el evento We, Robot, la presentación del Cybercab que tuvo como principal atractivo la presencia de sus robots autónomos. Sin embargo, poco después se descubrió que estos no eran tan independientes como muchos creían, ya que varios humanos estaban al cargo del control de sus gestos y sus respuestas. Y, por desgracia para Musk, esta no es la única noticia negativa que ha protagonizado en las últimas horas.
Como indica el portal Ars Technica en una reciente publicación, varios antiguos ejecutivos de Twitter piden una indemnización de 183 millones de euros a Musk a raíz de toda la polémica surgida con la plataforma. Así, Parag Agrawal y otros antiguos líderes de la red social afirman que Musk les ha negado el pago de una indemnización millonaria tras la compra de la plataforma y, por ello, llevan siete meses sin poder acceder a documentos cruciales que probarían que se les deben esos 183 millones de euros. Además, también se alega que Musk ha evitado pagar indemnizaciones a miles de empleados no ejecutivos despedidos, un grupo que ya le ha demandado en masa.
Musk tendría una fijación especial contra los ejecutivos
Según señala la noticia original, parece ser que Musk tendría una fijación especial contra los antiguos ejecutivos y, por ende, ha retrasado al máximo todos los aspectos relacionados con los pagos. De hecho, el propio Musk intentó justificar la ausencia de pagos alegando que estos habían tenido una mala conducta en el pasado. Sin embargo, Agrawal y el resto de afectados señalan que estas afirmaciones son falsas y, además, han compartido su temor por los actos deliberados de Musk para buscar alargar el litigio con la intención de evitar el pago.
De esta forma, los antiguos miembros de Twitter (ahora llamada X) piden al tribunal que se reabra el descubrimiento de pruebas antes de que Musk "arruine la plataforma", razón por la que se ha programado una audiencia para el próximo 15 de noviembre. Además, también esperan que el tribunal de luz verde a las indemnizaciones, una situación que podría incluir acciones valoradas al precio de la adquisición de casi 40.000 millones de euros. No obstante, como Musk ha ganado algunas demandas relacionadas con despidos e incluso ha negociado con varios de ellos, estos temen que el litigio se alargue hasta que X esté en una situación financiera irreversible.
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