Hace una semana conocimos que OpenAI, la firma detrás de ChatGPT, tiene en mente un cambio de paradigma. Después de años operando sin ánimo de lucro, Sam Altman y el resto de miembros de la junta están interesados en obtener mayores beneficios con sus herramientas. Y, después de una nueva ronda de financiación, no solo han obtenido una valoración histórica, sino que también han obtenido una recaudación de lo más ambiciosa para sus intereses.
Como señala el portal The Verge en una reciente publicación, OpenAI obtuvo una recaudación de 6.000 millones de euros en su nueva ronda de financiación. Thrive Capital lideró la ronda de financiación con una apuesta cercana a los 1.000 millones de euros, guardándose la opción de invertir la misma cantidad en 2025 siempre que OpenAI obtenga los mismos beneficios. No obstante, los fondos están condicionados por un aspecto: OpenAI debe convertirse en una empresa con fines de lucro antes de 2027. De no hacerlo, los inversores pueden solicitar la devolución del dinero.
Sam Altman está en el punto de mira
En la actualidad, una pequeña parte de OpenAI continúa operando sin ánimo de lucro y, por ello, las ganancias de los inversores están limitadas a un retorno de 100 veces. No obstante, la compañía planea cambiar dicha posición y, además, pidió a los inversores que eviten apoyar a otras startups rivales como Anthropic o xAI, la firma de Elon Musk. De hecho, con esta ronda de financiación han conseguido superar ligeramente a la compañía del multimillonario, ya que esta logró poco más de 5.000 millones de euros en mayo de este mismo año.
De esta forma, la valoración de OpenAI es aproximadamente 40 veces mayor que su ingreso anual proyectado, una situación que refleja el gran interés y las expectativas que existen en torno a la inteligencia artificial en Silicon Valley. Además, se estima que la firma generará más de 3.000 millones de euros anuales en 2024 y, en 2025, conseguirán aumentar dicha cifra hasta los 11.000 millones de euros. Con ese capital, su intención es mejorar los modelos de inteligencia artificial, una situación que ha llevado a Sam Altman a estar en el ojo del huracán.
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