La última década ha estado marcada por el crecimiento desmedido del interés en las criptomonedas, una serie de divisas digitales cuyo mayor atractivo es la descentralización. Por desgracia, a pesar de que existen historias protagonizadas por usuarios que han sido capaces de hacerse millonarios de la noche a la mañana, la gran mayoría de las anécdotas relacionadas con este mundillo cobran relevancia al estar relacionadas con fraudes o estafas.
Dicha situación, por desgracia, ha vuelto a repetirse de la forma más rocambolesca posible. Como indica el portal Ars Technica en una reciente publicación, Remy Ra St. Felix y su banda criminal se dedicaban a robar criptomonedas, pero lo hacían de una forma tradicional: intimidando a las víctimas en su propio domicilio utilizando la violencia extrema. En abril de 2023, St. Felix investigó a una pareja de 76 años a la que decidió atacar, pero por desgracia se equivocó de objetivo al pensar que se trataba de un importante inversor de criptomonedas. Y esto, por si ya no fuera suficiente, fue solo el último de una serie de golpes marcados por la agresividad.
Llegaron a grabar vídeos golpeando a sus víctimas
La actividad de St. Felix comenzó unos años atrás, fecha en la que llevó a cabo varios robos en los que pedía a las víctimas que le hicieran una transferencia de sus Bitcoin. De hecho, durante un robo fallido en Florida, llegaron a secuestrar y golpear brutalmente a su víctima, momento que aprovecharon para grabar y pedir un rescate en criptomonedas. De esta forma, consiguieron 150.000 euros en divisas digitales y, además, también robaron dos relojes Rolex a algunas de sus numerosas víctimas.
Por desgracia, el robo que tuvo lugar contra la pareja de 76 años fue el más macabro de todos. Después de atacar al hombre y atar a ambos con bridas, amenazaron con violar a su esposa y cortar sus genitales si no cooperaba y les daba acceso a una cartera de criptomonedas. Tras conseguirlo, se comunicaron a través de Telegram con el líder de la operación en tiempo real mientras intentaban vaciar las cuentas de la víctima. Por suerte, St. Felix y otros cómplices fueron arrestados en julio de 2023 y están condenados a sentencias de más de 15 años de prisión y, en algunos casos, tendrán que pagar multas de varios millones de euros.
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