En el año 2005 los niños de por aquel entonces nos encontrábamos inmersos en un montón de mundos de fantasía y uno de ellos comenzó con Las Crónicas de Narnia: El león, la bruja y el armario. Veníamos de Harry Potter o de El Señor de los Anillos con mucho entusiasmo, por lo que una nueva saga de fantasía era bien recibida. Por aquel entonces también se reeditaron las novelas y, en definitiva, era el momento de nuestra infancia perfecto para soñar despiertos.
Sin embargo, lo que parecía un gran proyecto terminó de forma repentina. Por ello, ahora que la primera entrega se encuentra disponible a través de Disney Plus, es un buen momento para recordar viejos tiempos.
Dónde ver Las Crónicas de Narnia
Las Crónicas de Narnia: El león, la bruja y el armario es la primera entrega de una trilogía. Sin embargo, si nos remitimos a los libros, esta sería la segunda parte de la historia. En ella conocemos a Susan, Lucy, Peter y Edmun, cuatro hermanos que se ven obligados a huir de Londres durante los bombardeos en la Segunda Guerra Mundial. Así, llegan a casa de un solitario profesor, el cual tiene un extraño armario en una de sus habitaciones.
Lucy es la primera en atravesarlo y llegar a Narnia, un mundo de fantasía medieval amenazado por la ira de la Bruja Blanca. Pronto, ella y sus hermanos descubren que son los elegidos para derrotar a la villana y coronarse como reyes del lugar. Así, se da lugar a una entrega llena de magia, animales fantásticos y guerra.
Esta entrega de las Crónicas de Narnia destacó en su momento por muchas cosas. Uno de los motivos principales, -que incluso recuerdo que salió en las noticias de entonces-, fue la creación de Aslan, el león, por CGI. El nivel conseguido era tan bueno que llamó mucho la atención y es que el felino contaba con 5.2 millones de pelos que tuvieron que ser renderizados durante horas y horas.
Otra virtud con la que contaba esta película dirigida por Andrew Adamson era que no había un solo protagonista. Si bien Peter, el hermano mayor, tenía el papel más importante, encontrábamos un rango de edades distinto que encajaba con muchos niños. De esta forma, cada pequeño espectador podía encontrar su rey preferido. Además, casi como si se tratase de un videojuego, era curioso ver cómo cada hermano tenía características muy distintas, tal vez a excepción de Edmund y Peter. Sin embargo, encontrábamos guerreros en ellos, una arquera en Susan y una curandera o maga en Lucy.
A todo esto hay que sumar unas interpretaciones muy buenas, tanto por parte de los adultos con Tilda Swinton como bruja o James McAvoy como fauno, como por parte de los cuatro niños. Y es que en esta cinta se nota que pusieron toda la carne en el asador, tratando de traer un universo bien construido y creíble. Es verdad que algunos efectos han podido envejecer peor, pero en general se nota que se hizo un esfuerzo para que la cinta resultara de buena calidad. Por ejemplo, si la vemos a día de hoy, veremos que muchas criaturas no estaban hechas únicamente por CGI o que los escenarios estaban muy bien construidos.
No menos importancia tiene en esta cinta la capacidad de mezclar misterio, un poquito de terror, fantasía y épica de una forma convincente. Toda la parte de la guerra está muy bien ejecutada, además de contar con una banda sonora efectiva. Por todo ello, esta entrega recaudó más de 700 millones de dólares. Eso daba pistoletazo de salida al resto de aventuras de los hermanos Pevensie como El Príncipe Caspian o La travesía del viajero del Alba. Sin embargo, lo que parecía ser una larga saga que contaba con un total de 7 novelas en la que inspirarse acabó en tan solo tres película. ¿Qué pasó? Si nos fijamos en la recaudación del resto de películas, aunque sea inferior, no son cifras malas.
Varios cambios en los derechos de la historia, la retirada de Disney del proyecto y la aparición de una serie de Netflix hicieron que una cuarta película fuera cancelada cuando el proyecto ya estaba en marcha. Una pena teniendo en cuenta que las cintas, mejores o peores, tenían mucha personalidad y un universo increíble que seguir expandiendo. Con todo ello, lo cierto es que la primera película se puede ver por separado perfectamente y ahora que está en Disney Plus es un gran momento de recordar nuestra infancia.