¿Sois más de finales felices o de finales tristes? Robert Kirkman, padre de The Walking Dead, se tuvo que decantar por una de estas dos opciones cuando hace cinco años decidió dar carpetazo a la serie original después de una muy exitosa carrera de 192 cómics. Pero la opción que escogió el también autor de Invencible no fue la única que pensó para su historieta. Tiempo antes trabajó sobre otro desenlace radicalmente distinto, y también bastante más prematuro.
Sin entrar en spoilers innecesarios sobre The Walking Dead, basta con que sepáis que su último número nos invitaba a dar un salto adelante de varios años, hacia un futuro donde los caminantes (o zombis) estaban prácticamente extintos y se habían convertido en objeto de curiosidad circense para los vivos. Habíamos ganado y los problemas de los humanos empezaban a ser más mundanos. Sin embargo, Kirkman tuvo otra idea "más sombría, triste y posiblemente terrible".
"Este final se me ocurrió alrededor de TWD #50, quizás incluso antes. La idea era que Alexandría sufriera un ataque masivo en el que todos, unidos, hubieran derrotado a los zombis. (...) Tras esto, tendríamos a Rick soltando una arenga a una multitud y en la siguiente página veríamos una estatua que conmemoraba ese discurso. Pero ya habían pasado varios años y Alexandría estaba en ruinas, abandonada. La última viñeta era un caminante pasando por ahí". Kirkman
"La idea era que Alexandria fuera lo suficientemente exitosa como para que Rick viviera el resto de su vida allí y tuviera una estatua erigida en su honor, pero que, después de todo, la ciudad cayese y el apocalipsis zombis simplemente siguiera su curso", añade el guionista. "Así que, dejaríamos a los lectores con la idea de que, independientemente de lo que hiciera la gente... los zombis iban a ganar", concluye Kirkman en el anexo de TWD: Deluxe #84 donde se suponía que iba a haber pasado todo esto. No fue así y aún disfrutamos de Rick 100 tebeos más.
Andrew Lincoln sabía de este triste desenlace
Kirkman decidió cambiar de opinión y alargar la historia simplemente porque aún se estaba divirtiendo bastante con sus personajes, "créanme cuando les digo que escribir esta serie fue una gran fuente de alegría en mi vida". Pero la cosa iba tan en serio que quiso compartir sus planes con Andrew Lincoln y Greg Nicotero, el actor de Rick y el productor de la adaptación de AMC. Ambos tuvieron la cortesía de "fingir" su entusiasmo con la idea. Como sabemos, la serie siguió otro rumbo.
Es más, de hecho la adaptación aún tiene mucho que contarnos. Aunque el show original acabó hace un par de años, sus spin-offs siguen en marcha. En unos días se estrena la segunda temporada de Dead City, y más adelante llegará la tercera temporada de Daryl Dixon, renovada oficiosamente para otro año de historias.
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